Este coto minero está situado en la pequeña localidad de Monasterio de Hermo, perteneciente a la comarca de Cangas del Narcea.
Nada mas llegar a la zona los excursionistas murcianos, acostumbrados a los tonos pardos y grises de su tierra, se quedaron impresionados con los colores otoñales de la vegetación, rojos amarillos y verdes que aparecían en una amalgama cromática en plena ebullición.
Destaca la magnitud de esta explotación minera que surtió profusamente de lignitos y antracitas a todas las centrales térmicas de la zona. La labores están distribuidas en cinco niveles a lo largo de varios kilómetros.
Las antiguas instalaciones están en pleno proceso de ser desmontadas, por lo que posiblemente en breve sean un recuerdo y solo queden algunas fotos de las mismas, como las que aparecen en esta entrada.
Aunque este coto minero no tienen interés mineralógico, en las escombreras de estas minas los excursionistas observaron fragmentos de pizarras (algunos de gran tamaño) con helechos fósiles del carbonífero muy interesantes, que están condenados a desaparecer para siempre porque las escombreras serán "restauradas".
Desde aquí hacemos un llamamiento a los conocidos patrigeólogos (de las comisiones de patrimonio geológico de conocidas organizaciones "científicas") que defienden sin descanso el patrimonio geológico, para que se desplacen desde la Universidad de Murcia, desde Madrid... (o desde dónde quiera que estén enarbolando sus banderas) lo antes posible a Asturias y frenen la destrucción de estas escombreras, y así evitar la desaparición de tantos y tantos interesantes fósiles que allí hay. A no ser que la defensa tan radical del patrimonio geológico mueble (o "inmueble") de la que pretenden hacer gala, sea solamente sobre el papel y de "boquilla". Confiamos que hagan un esfuerzo y que de inmediato vayan a Asturias a defender este magnífico patrimonio geológico tan amenazado.
Cabe destacar que la legislación vigente prohíbe recoger fósiles a los particulares, aunque formen parte de residuos de explotaciones mineras, por los que nuestros socios, muy concienciados, dejaron allí mismo las piezas encontradas, aunque eso sí, la norma permite, siguiendo un procedimiento establecido, la "desaparición" como en este caso de toneladas de fósiles de un gran interés científico y cultural con la "restauración" ambiental de las escombreras mineras.
Todas las fotografías que siguen han sido tomadas sobre el terreno por Pablo Buitrado con su teléfono móvil, por lo que la calidad de algunas es muy baja.
El bosque asturiano en todo su esplendor otoñal
Instalaciones medio derruidas del Coto Narcea
Todavía quedan algunos enseres de los mineros
La proverbial inventiva minera
La vegetación reclamaba su antiguo espacio
Señales en el interior
Impresionantes vistas desde el coto minero
Restos de maquinaria
Viejas vagonetas
Helecho fósil fotografiado in situ
Otra muestra
Otra especie
Una muestra
Una bonita hoja de helecho que desaparecerá con la restauración de las escombreras si los patrigeólogos no se dan prisa en rescatarla
Pedro Rubio impresionado con esta gran calabaza de un pueblo vecino
Bonitos fósiles. La verdad es que debieran tomar conciencia y dejarse de luchas para unirse a todas las fuerzas que pretendemos proteger, no solo el patrimonio sino la Naturaleza pero de una forma razonable y científica.
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